Investigadores del Boyce Thompson Institute han construido un “super-pangenoma” de la sandía moderna y sus parientes silvestres, descubriendo genes beneficiosos perdidos durante la domesticación que podrían mejorar la resistencia a las enfermedades y la calidad de la fruta de esta importante fruta a nivel global.
Amarga y blanca: Por qué comer sandías podía ser letal hace 6.000 años
Las semillas más antiguas conocidas de un pariente de la sandía, que datan de hace 6.000 años, del período Neolítico, se encontraron durante una excavación arqueológica en Libia. Una investigación de estas semillas dirigida por la bióloga Susanne S. Renner de la Universidad de Washington en St. Louis revela algunas sorpresas sobre cómo nuestros antepasados utilizaron un antecesor de la sandía actual.
La ciencia tras los secretos y el origen de sandías y melones
Sabemos que estas hortalizas dulces se domesticaron varias veces a lo largo de la historia de la humanidad, pero seguimos sin conocer su origen exacto. Y este no es el único misterio. Investigadores de todo el mundo buscan la manera de lograr variedades de diferentes aromas y tamaños, que soporten condiciones de estrés ambiental.
Nuevo estudio traslada el origen de la sandía desde el sur de África al Antiguo Egipto
Antiguamente blanquecinas y amargas, las sandías no siempre fueron las dulces y rojas frutas actuales. Ahora un nuevo estudio sitúa el origen de las actuales características de esta fruta veraniega en el Valle del Nilo, en el Antiguo Egipto.
Genes silvestres para mejorar el sabor y resistencia de la sandía moderna
Un equipo internacional de investigadores ha examinado exhaustivamente los genomas de siete especies silvestres de sandía, creando un recurso que podría ayudar a los fitomejoradores a aumentar la calidad y la capacidad de la fruta doméstica para prosperar en una era de cambio climático.