Investigadores de la Academia Checa de Ciencias están utilizando tecnologías genéticas de última generación para modificar el lúpulo con el objetivo de que contenga una alta cantidad de sustancias que ayuden contra el cáncer, la inflamación y bacterias dañinas. El lúpulo convencional contiene sustancias beneficiosas, pero en muy baja cantidad, y a través de la cerveza, su efecto se pierde por el efecto nocivo del alcohol y otros ingredientes. A través de edición genética, esto se podría revertir y quizás desarrollar una «cerveza medicinal».