Es primera vez que se logra combinar resistencia a enfermedades y mayor contenido nutricional en un cultivo distinto a los cereales. Este nuevo avance ofrece la alternativa de mejores cultivos para los agricultores, y que al mismo tiempo reduzcan el «hambre oculta» en países africanos que dependen de la yuca, una raíz alta en calorías pero pobre en nutrientes clave como hierro y zinc, situación que genera retraso cognitivo, debilitación del sistema inmune y problemas de crecimiento.