La prisa por desarrollar una vacuna para COVID-19 se ha extendido a Italia e Israel, donde los científicos están utilizando las herramientas de ingeniería genética para desarrollar «vacunas comestibles» mediante microalgas genéticamente modificadas (GM) con antígenos contra la enfermedad causada por el nuevo coronavirus.
Científicos italianos trabajan en vacuna oral contra COVID-19 en base a microalgas transgénicas
A diferencia de vacunas convencionales, expresar antígenos en microalgas reduce enormemente el costo en infraestructura, almacenamiento y transporte, sin la necesidad de cadena de frío o purificación final para consumo directo.