Investigadores de la Universidad de Illinois Urbana-Champaign han conseguido hacer más eficiente la fotosíntesis en las plantas de soja, logrando un notable aumento de rendimiento sin incrementar el uso de fertilizantes, en un importante avance que permitirá reducir el avance de la frontera agrícola para la producción de alimentos.
Estudian capacidad de adaptación de la quinua para crecer en suelos bajos en nutrientes
La reciente investigación publicada en BMC Plant Biology apunta a la importancia de seleccionar ecotipos de quinua que sean eficientes en la absorción y uso del nitrógeno. De esta manera, es posible evitar la aplicación de fitosanitarios que implican un daño medioambiental y un alto costo económico para los agricultores.
La edición genética podría reducir la contaminación de fertilizantes fosforados
Investigadores de la Universidad de Copenhague (Dinamarca), han descubierto un gen importante en las plantas que podría ayudar a los cultivos agrícolas a colaborar mejor con los hongos subterráneos, proporcionándoles redes de raíces más amplias y ayudándoles a absorber el fósforo. Desactivando este gen con edición genética podría aumentar la eficiencia agrícola y beneficiar el medio ambiente.
Investigadores chilenos logran triplicar el crecimiento de plantas sin abusar de fertilizantes
El principal resultado de la investigación ayudaría a limitar el uso de fertilizantes en cultivos agrícolas, disminuir la contaminación por compuestos nitrógenados en cursos de agua y, a su vez, mejorar el crecimiento de las plantas. Se publicó en revista de la Academia de Ciencias de Estados Unidos.
Los genes de fijación de nitrógeno podrían ayudar a cultivar más alimentos usando menos recursos
Científicos han transferido una colección de genes a bacterias colonizadoras de plantas, permitiéndoles extraer nitrógeno del aire y convertirlo en amoníaco, un fertilizante natural. El trabajo podría ayudar a los agricultores de todo el mundo a usar menos fertilizantes sintéticos para producir cultivos alimentarios importantes como el trigo, el maíz y la soya.
Plantas editadas genéticamente contra el cambio climático: 5 enfoques con CRISPR
¿Cultivos que producen su propio nitrógeno y no necesitan fertilizantes? ¿Plantas que evitan la emisión de metano y absorben más carbono? ¿Cultivos más resistentes a ambientes extremos y que duran más tiempo, evitando así el desperdicio alimentario? Mira los nuevos avances que se están desarrollando gracias a la revolucionaria técnica de edición genética con CRISPR en un contexto de cambio climático.
Descubren una importante asociación planta-hongo para crear mejores cultivos
Un equipo de científicos liderado por el Laboratorio Nacional Oak Ridge del Departamento de Energía de Estados Unidos, descubrió un gen específico que controla una importante relación simbiótica entre las plantas y los hongos del suelo, el cual facilita exitosamente la simbiosis en una planta que generalmente la resiste.
Transgénicos y abejas
Una nota publicada en el sitio web de CNN Chile, reproducida además por sus redes sociales, tituló esta semana “Pesticidas, cambio climático y cultivos transgénicos: Los tres sospechosos de la mortandad de las abejas”.
Calor, sal y sequía: esta nueva cebada puede soportar los desafíos del cambio climático
Una nueva línea de cebada logra buenos rendimientos agrícolas incluso en condiciones ambientales deficientes. Fue mejorada y desarrollada por un equipo de investigación de la Universidad Martín Lutero de Halle-Wittenberg (MLU) de Alemania, cruzando una variedad comercial con varios tipos de cebada silvestre. Luego, los investigadores plantaron las nuevas líneas de cebada en cinco lugares muy diferentes en todo el mundo, observaron el crecimiento de las plantas y analizaron su composición genética. Como informa el equipo en la revista «Scientific Reports», algunas de las plantas no solo eran más resistentes al calor y la sequía, sino que en muchos casos alcanzaban rendimientos más altos que las variedades locales.
Una nueva forma de cultivar en suelos marginales podría ayudar a alimentar al mundo
Científicos de Stanford descubrieron la capacidad de plantas silvestres para acceder a nutrientes que los cultivos agrícolas no pueden absorber en suelos alcalinos. Ahora, mediante ingeniería genética se plantea traspasar esa característica hacia cultivos agrícolas que tendrían el potencial de abrir más tierras de cultivo para la producción de alimentos de manera sustentable.