En una entrevista publicada por el diario La Nación de Paraguay, dos expertos del sector agrícola de ese país, analizan el impacto positivo que tiene la adopción de los cultivos transgénicos en ese país.
La adopción de la biotecnología en Paraguay tuvo un impacto muy positivo en el crecimiento de la economía nacional y en un futuro, con la liberación comercial de nuevos eventos, la agricultura permitirá otro gran avance, según manifestaron representantes del sector productivo. El algodón, podrá recuperar su trascendencia en la economía y el maíz podrá potenciarse con mayor producción, exportación y materia prima para industrias.
Julio González (JG), representante del Instituto Nacional de Biotecnología Agrícola (Inbio) y Regis Mereles, presidente de la Asociación de Productores de Soja, Cereales y Oleaginosas (APS), analizan todos los aspectos de la biotecnología en Paraguay y las perspectivas y oportunidades que hay para el futuro.
La Nación: –¿Cuál es el beneficio real del uso de la biotecnología en la agricultura y su incidencia económica para un país?
Julio González: –El impacto para un país es muy importante, porque permite el desarrollo de la economía agrícola, con mayores oportunidades de competencia. Permite obtener productos a menor costo y de mejor calidad. Por poner un ejemplo, en Paraguay la producción de soja hubiese sido muy dificultada sin la biotecnología y hoy en día es el principal eslabón de la economía.
LN: –El algodón, con la liberación del BT, ¿qué perspectivas tendrá?
JG: –El gran despegue de la biotecnología en el país se va a dar en el algodón y el mayor impacto se verá en este rubro. Aumentará la producción y las áreas cultivadas. Con la disponibilidad del algodón BT el cultivo va ganar otra vez relevancia y en los próximos cinco años, si sigue esta tendencia de buenos precios, podríamos llegar otra vez a 300 a 500 mil hectáreas de algodón, y va a ser muy importante y podría insertar a 250 mil productores. La productividad por hectárea podrá incrementarse y llegar hasta 1,7 toneladas por hectárea.
Regis Mereles: –Más que perspectiva una oportunidad. De acuerdo al último Censo Agropecuario, en nuestro país aun existen cerca de 200.000 pequeños productores, que en general mantienen la cultura algodonera, es decir, si hubiere semillas mejoradas y un apoyo público privado para su recuperación, podrá constituirse nuevamente el algodón entre los dos o tres rubros principales de nuestra economía en materia agrícola y con un valor agregado importante en la generación de mano de obra familiar campesina e industrial, dada la existencia de varias desmotadoras subutilizadas en los últimos diez años.
LN: –En maíz, ¿la liberación de eventos transgénicos (características especiales gracias a la ingeniería genética) qué efectos positivos generarían?
JG: Hay expectativa por la liberación de tres eventos en maíz y podemos saltar de una productividad promedio de 4,5 toneladas por hectárea y llegar a 9 toneladas por hectárea. Esto va a posicionar al país como productor de este cereal y hay una demanda importante. Esperamos que el 2012 sea un buen año para el área biotecnológica agrícola.
LN: –¿Cuál es el potencial de Paraguay en la producción de granos?
JG: –En Paraguay se puede duplicar la producción de granos en los próximos 10 años, potenciando el área agrícola que se está usando y aprovechando las tierras agrícolas que hoy en día no se están utilizando. Se están cultivando 4,2 millones de hectáreas, pero se pueden llegar a 7 millones de hectáreas.
Fuente: La Nación