Tras cuatro años de debate, la Comisión Europea (CE) ha aprobado esta mañana la reforma legislativa sobre cultivos transgénicos u organismos modificados genéticamente (OMGs) que permitirá a los Estados miembros vetar los OMGs en su territorio pese a que estén autorizados a nivel comunitario y a pesar de que cuenten con los avales científicos de seguridad pertinentes. Una normativa que deja de lado a la ciencia para dar mayor libertad a los Estados miembro permitiéndoles vetar los OMGs por cualquier razón, incluso las ideológicas.
Esta normativa busca desbloquear las autorizaciones de cultivos transgénicos. Actualmente la Unión Europea cuenta con retrasos acumulados en aprobaciones de cultivos MG que superan los 40 años. Retrasos que vulneran la legislación vigente y que no cuentan con justificación científica ya que todas las variedades que esperan su aprobación han superado todos los controles de seguridad pertinentes realizados por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA).
La nueva normativa, que ha sido aprobada hoy por la Comisión Europea, ha contado con el apoyo de todos los Estados miembro, incluida España, excepto Bélgica y Luxemburgo que se han abstenido en la votación.
El nuevo texto contempla un procedimiento en dos fases para autorizar el cultivo de un MG. Como hasta ahora, la EFSA realizará le evaluación científica de riesgos para la salud y el medio ambiente. En esta fase los Estados miembros podrán notificar a la CE que desean quedar excluidos de dicha aprobación. La CE informará a la compañía y si ésta accede se seguirá adelante con el proceso de autorización dejando fuera a los países que han pedido ser excluidos.
Si la empresa rechaza la limitación de la autorización se pasaría a la segunda fase en la que los Estados miembros deberían informar los motivos por los que no quieren que esa aprobación tenga efectos dentro de sus fronteras. La normativa incluye una lista abierta de razones que pueden ser usadas, entre ellos se encuentran: política medioambiental o agrícola, gestión del territorio, impacto socioeconómico e incluso el orden público.
Una vez que el cultivo MG reciba la autorización de la UE los Estados miembros podrán vetarlo en su territorio. Este avance en la reforma legislativa sobre OMGs ha venido impulsado por el caso del maíz 1507, variedad que lleva doce años a la espera de ser aprobada pese a haber recibido siete dictámenes científicos positivos de seguridad por parte de la EFSA.
Fuente: Fundación Antama (http://fundacion-antama.org/reforma-legislacion-transgenicos-union-europea/)