Filipinas sigue siendo protagonista en la adopción y comercialización de cultivos transgénicos, superando incluso a gigantes como China e India.
En la Conferencia Internacional sobre Adopción de Cultivos transgénicos en el Mundo en Desarrollo, celebrada en Manila, se presentaron casos de agricultores procedentes de China, India y Filipinas. En este evento, el dirigente rural Delson Sonza de la ciudad de Sara, provincia de Iloílo, señaló que más y más agricultores de su región están cultivando maíz transgénico resistente a insectos (maíz Bt), introducido en 1998, debido a sus enormes beneficios económicos y ambientales.
La Conferencia de dos días fue organizada por la Fundación John Templeton, el Centro Regional para Asia Sudoriental para estudios de Posgrado e Investigación en Agricultura (SEARCA), la Academia Nacional de Ciencia y Tecnología, el Proyecto II de Apoyo a la Biotecnología Agrícola y el Servicio Internacional para la Adquisición de Aplicaciones Agrobiotecnológicas (ISAAA).
El Director del SEARCA, el Dr. Gil C. Saguiguit Jr. señaló, frente a los participantes de China, India, América del Sur y del Norte, África y Europa, que la conferencia había sido crucial en el aprendizaje de cómo el mundo viene cultivando transgénicos responsablemente y por qué algunos países están avanzando y defendiendo su soberanía y seguridad alimentaria, mientras otros quedan rezagados.
«Como centro regional para la agricultura, el SEARCA ve a la biotecnología como una herramienta importante para aumentar la producción de alimentos a la luz de las actuales preocupaciones de la región sobre la seguridad alimentaria y una población en crecimiento,» dijo Saguiguit. «Sin embargo, hay algunos que son escépticos con respecto a la adopción de esta tecnología, basados en relatos anecdóticos sobre efectos perjudiciales para la salud humana y ambiental. Pero como sujetos racionales, por el contrario, debemos considerar la evidencia científica y empírica a la hora de tomar la decisión de adoptar o no biotecnología”, dijo.
Según Sonza, tan convencidos estaban los agricultores de Iloílo que la superficie sembrada con maíz Bt aumentó de 1.800 hectáreas a 9.300 hectáreas en dos años. “Cada agricultor de maíz Bt gana un promedio de P30, 000 por hectárea, y eso lo ayuda a ahorrar más dinero que el cultivo convencional. Debido al aumento de los ingresos, los niños pueden ahora asistir a la escuela y aún matricularse en la Universidad”, agregó.
Fuente: ArgenBio (http://www.argenbio.org/index.php?action=notas¬e=6377)