En Chile se cultivan 25 mil hectáreas aprox. de semillas transgénicas para exportar, sin embargo está prohibido comercializarlas dentro del país.
Esa es una de las situaciones que el ministro de Agricultura, José Antonio Galilea, se ha propuesto cambiar durante su periodo. Y sabe que no será una situación fácil, porque los debates que se han generado cada vez que se quiere discutir sobre el tema, son acalorados y con miradas de corto plazo.
«No es posible que nos siga rigiendo una normativa que además de insuficiente, es completamente absurda», aseguró el secretario de Estado en la inauguración de una planta agrícola en Los Ángeles.
Lo paradójico, según la autoridad, es que actualmente ingresan al mercado interno importantes cantidades de alimentos procesados con esta tecnología y se consumen en todos los ámbitos alimenticios. Los precios más bajos que ofrecen los productos transgénicos extranjeros, es una desventaja vital que hace competir sin igualdad de condiciones a los productores nacionales. Por ello, la única forma de cambiar esta situación, dice Galilea, es un cambio legal y no una norma que responda a un contexto particular, sino que se proyecte en el largo plazo.
«Lo que más quisiéramos en el Ministerio es que responsabilidades de esta naturaleza estuvieran radicadas en una ley para conocimiento y uso de todos los sectores involucrados», relató ante un numeroso grupo de agricultores de la zona.
De todas maneras, el ministro sabe que tomar este tipo de decisiones requiere de una señal clara de unidad entre la autoridad y los principales beneficiados.
El llamado fue directo. «Tenemos que defender férreamente esta postura».
«No voy a usar esta tribuna para argumentar en favor de la biotecnología y del uso de vegetales genéticamente modificados en la agricultura, pero es bastante evidente que si muchos países del mundo y en más de 150 millones de Ha en el planeta se cultivan con este tipo de tecnologías, es claro que constituye una ventaja para el sector agrícola».
El proyecto para normar por ley los vegetales genéticamente modificados ha iniciado su trámite en el Congreso, confirmó Galilea. Chile está perdiendo oportunidades de avanzar en este ámbito y está desaprovechando el momento de convertirse en la verdadera potencia alimentaría que busca ser, según han dicho diversas personalidades de gobierno y los empresarios del rubro.
Fuente: Diario El Sur de Concepción