El presidente de SAGO destacó la potencialidad de las técnicas modernas de mejoramiento genético vegetal para la agricultura de la zona, así como para su menor impacto medioambiental.
ChileBio / 7 de septiembre, 2021.- El presidente de la Sociedad Agrícola y Ganadera de Osorno (SAGO), Christian Arntz, en compañía del director Ricardo Montesinos, y el gerente general de la organización, José Antonio Alcázar, se reunió con el presidente de ChileBio, Cristián Carvallo, y su director ejecutivo Miguel Ángel Sánchez.
En la cita, ChileBIO, asociación sin fines de lucro, dedicada a informar y educar sobre biotecnología agrícola, con información respaldada por estudios científicos y/o fuentes fidedignas, realizó una exposición sobre las potencialidades de los cultivos mejorados mediante biotecnología en la Región, así como sobre la situación regulatoria de estos en el país.
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Christian Arntz valoró los antecedentes entregados por el doctor en Ciencias Biológicas, Miguel Ángel Sánchez. No obstante, afirmó que “preocupa que en nuestro país haya existido una total resistencia a la producción de variedades de cultivos mejorados a través de la biotecnología para el consumo humano y animal. Por otro lado, esta situación se contrapone con la libre autorización para importar estos productos y comercializarlos en el mercado nacional en distintos formatos que son adquiridos y consumidos en el país sin restricción alguna”.
“Gracias a la biotecnología, existen distintas técnicas para desarrollar nuevas variedades de cultivos con interesantes propiedades, que entre todas ellas permiten ahorrar costos de producción, hacer que algunos productos agrícolas sean resistentes a machucones y pestes, trigos resistentes a largos períodos de sequía o granos de canola con altos contenidos de Omega 3. Y desde el punto de vista ambiental, las nuevas variedades desarrolladas gracias a la biotecnología permiten producir con menores cantidades de agua, fertilizantes y agroquímicos, dejando una menor huella de carbono que las variedades tradicionales”, agregó el presidente de SAGO.
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Por su parte, el director ejecutivo de ChileBio, explicó que hoy existen cultivos que podrían ser un aporte para la sostenibilidad de la industria salmonera y de ingresos para los agricultores de la zona, como es el caso de la canola mejorada para tener mayores niveles de omega-3. “Por vacíos regulatorios y falta de voluntad política, los agricultores de la zona no pueden cultivarlos, y los ingresos esperados los obtendrán agricultores de otros lugares del mundo, desaprovechando una gran oportunidad”, puntualizó.
Es por ello, que las entidades concordaron en solicitar a la autoridad que se genere una instancia en el Ministerio de Agricultura dedicada a prospectar las potencialidades de la biotecnología vegetal y en qué casos se autoriza, generando políticas claras al respecto. “En el ministerio hay 14 mesas técnicas y ni una relativa a estos temas”, indicó Sánchez.
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Ambas organizaciones acordaron una agenda de trabajo conjunta para impulsar la evaluación de las potencialidades de estas técnicas y también educar al respecto, para terminar con prejuicios que muchas veces nublan las decisiones. “Mientras que en países como Brasil, Estados Unidos, Canadá e India la adopción de estos cultivos ya supera el 90%; y en el mundo la superficie de variedades transgénicas supera los 190 millones de hectáreas, nuestro país mantiene una peligrosa parálisis que pone en riesgo al sector alimentario nacional y sus fuentes de trabajo. El llamado de nuestra institución a las autoridades es a trabajar por asegurar la seguridad alimentaria para nuestras próximas generaciones”, concluyó el presidente de SAGO Christian Arntz.