Una nueva investigación ha identificado genes que controlan el contenido de vitamina E en el grano del maíz, un hallazgo que podría conducir a mejorar el perfil nutricional del cultivo básico más sembrado a nivel global.
Científicos de la Universidad de Cornell y colegas de otras instituciones combinaron diferentes tipos de análisis de asociación genética para identificar 14 genes en todo el genoma que participan en la síntesis de vitamina E. Se descubrieron recientemente seis genes para codificar proteínas que contribuyen a una clase de compuestos antioxidantes llamados tococromanol, conocido colectivamente como “vitamina E”. Junto con las propiedades antioxidantes, los tococromanoles se han asociado con una buena salud cardíaca en los seres humanos y un funcionamiento adecuado en las plantas.
«Hemos establecido una base casi completa para el mejoramiento genético de la vitamina E en granos de maíz y otros cereales principales», dijo Michael Gore, profesor asociado de fitomejoramiento y genética y coautor del estudio publicado en la revista The Plant Cell.
«Se ha hablado, entre los fitomejoradores que trabajan para aumentar la provitamina A en el maíz, de que podríamos aumentar la vitamina E al mismo tiempo», dijo Christine Diepenbrock, estudiante graduada en el laboratorio de Gore, y la primera autora del artículo. «Son compuestos relacionados bioquímicamente, y los tocromanoles son esenciales para la viabilidad de la semilla, ya que impiden que los aceites de las semillas se vuelvan rancios durante el almacenamiento de la semilla, la germinación y el desarrollo temprano de las plántulas».
El estudio fue financiado por la National Science Foundation, el USDA-ARS, fondos iniciales de la Universidad de Cornell y el USDA National Needs Fellowship..