En sus 20 años de comercialización, los cultivos transgénicos tolerantes a herbicidas, como la soya y la canola, han facilitado la cero labranza, lo que reduce la liberación de carbono del suelo y emisiones de CO2.
El continuo aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero se ha relacionado con un aumento de las temperaturas medias, lo que a su vez afecta la productividad de los cultivos agrícolas.
Frente a este escenario, la biotecnología puede colaborar en disminuir las emisiones que genera la producción agrícola o bien a enfrentar algunas de las consecuencias del cambio climático, como es la sequía.
Es por ello, que ChileBio ha lanzado un video en el que explica de qué manera la biotecnología vegetal está ayudando a los agricultores no sólo en la eficiencia de sus cultivos, sino también a ser más sustentables.
El video destaca que los cultivos transgénicos resistentes a insectos plaga requieren menos aplicaciones de insecticidas, lo que se traduce en un ahorro de combustible por menor necesidad de aplicaciones y, por lo tanto, hay menos emisiones de CO2.
Por otra parte, los transgénicos tolerantes a herbicidas han facilitado la cero labranza, lo que reduce significativamente la liberación de carbono del suelo y también las emisiones de CO2. Además, se disminuye significativamente la erosión de los suelos.
En el año 2014 hubo una disminución de 40 millones de ingrediente activo de pesticidas, -6,4% en relación con la agricultura convencional, al disminuir las aplicaciones de herbicidas y pesticidas, como por la menor necesidad de arado. De esta manera, las emisiones de CO2 disminuyeron 22.400 millones de kilos, lo que equivale a retirar de circulación por un año a cerca de 10 millones de vehículos motorizados.
El video muestra que, a través de la transgenia, también se pueden mejorar las características de los cultivos para enfrentar directamente los desafíos climáticos. Por ejemplo, cultivos transgénicos tolerantes a la salinidad del suelo, se encuentran en su etapa final de desarrollo. Se han encontrado más de una docena de genes en la naturaleza que influyen en la tolerancia a la sal, y se ha estado trabajando con estos en cultivos como la caña de azúcar, arroz, cebada, trigo, tomate y soya; entre otros.
También se ha estado avanzando en el desarrollo de cultivos transgénicos tolerante a la sequía, a partir de distintos tipos de genes que se encuentran en la naturaleza y que permiten obtener buenos rendimientos de producción con menores cantidades de agua. Por ejemplo, en maíz, se han conseguido aumento de rendimiento de 31% a 121% en condiciones de sequía. Notables avances se han obtenido además en arroz, trigo, caña de azúcar, tabaco, maní, tomate, papa y papaya.
Así, en Estados Unidos ya ha sido autorizado para comercialización un maíz tolerante a la sequía, y en Argentina se ha desarrollado una soya transgénica tolerante a esta condición.
El Director Ejecutivo de ChileBio, Miguel Ángel Sánchez, afirma que en el mediano plazo “se espera que estas innovaciones biotecnológicas, financiadas por el sector público y privado, estén disponibles para los agricultores, y así estos puedan disminuir la angustia e incerteza de perder sus cultivos producto de los desafíos climáticos”.
Sánchez a su vez, hace una invitación a informarse a través de este video disponible en el enlace https://chilebio.cl/?page_id=413 dentro del sitio web de ChileBio y a través de su canal YouTube en https://youtu.be/94O8WsG012k