Científicos de la Universidad Rural de Escocia (SRUC), el Instituto de Biología Evolutiva de la Universidad de Edimburgo, y del Rothamsted Research han secuenciado y explorado el genoma de el hongo patógeno Ramularia Collo-Cygni, causante de la mancha foliar Ramularia en la cebada y responsable de grandes pérdidas de cosecha. Dicho hongo se une a las células de las plantas de la cebada sin causar síntomas durante muchas semanas, hasta que se convierte en agresivo y tóxico cuando las condiciones cambian dentro de la planta.
El mecanismo detrás de este fenómeno era desconocido hasta ahora, pero un nuevo estudio ha identificado un gran número de genes implicados en la secreción de productos químicos potencialmente tóxicos a cargo de dicho hongo. Los nuevos datos son compatibles con las ideas actuales acerca de cómo evolucionó el hongo.
Los científicos confirmaron la clasificación del hongo dentro del mismo grupo que otros patógenos de plantas, y han situado como pariente cercano al Zymoseptoria tritici, la causa de mancha en el trigo. Encontraron genes comunes que se creen desempeñan un papel clave en ocultar el hongo al sistema inmunitario de la planta.
“La cebada es el segundo cultivo más común en el Reino Unido después del trigo, por lo que la mancha foliar Ramularia tiene grandes consecuencias para los agricultores locales, así como en el resto de Europa y en América del Sur. La gran similitud entre las secuencias del genoma de Ramularia y Zymoseptoria sugiere que pueden estar abiertos a una estrategia de prevención de enfermedades común”, explican los científicos.