China hará más esfuerzos en el estudio y la supervisión de los organismos genéticamente modificados (OGM) y en la educación de los ciudadanos en esta materia, en un contexto de preocupaciones relativas a su seguridad, según informó hoy martes una fuente oficial.
«La tecnología de modificación genética es muy prometedora y tenemos que estar a la cabeza en las investigaciones de modificación genética, ya que China cuenta con unos recursos agrícolas bastante limitados», dijo el subdirector de la oficina para el grupo dirigente central sobre trabajo agrícola, Han Jun.
Gracias a un equipo de destacados científicos, China ha alcanzado una posición líder en la investigación de arroz y maíz transgénicos, indicó Han. «Nuestro mercado de OGM no debe saturarse con marcas extranjeras», dijo el subdirector en una rueda de prensa.
China ha establecido estrictos mecanismos de supervisión para hacer un seguimiento de la investigación, pruebas, producción e importaciones de organismos genéticamente modificados y el país apoya la investigación innovadora en la materia, una supervisión estricta y una producción prudente, señaló la misma fuente.
La campaña para este año incluirá la promoción de los conocimientos sobre los transgénicos para que los ciudadanos tengan una comprensión clara y completa de los mismos, dijo Han, que añadió que muchos chinos todavía «palidecen» con solo mencionarles los OGM.
Los defensores de los transgénicos creen que la tecnología puede aumentar cosechas en tierras marginales, reducir el uso de sustancias químicas y ayudar a incrementar los niveles de vitamina A y de hierro en las cosechas. Los detractores arguyen que los transgénicos tienen efectos inciertos a largo plazo sobre los seres humanos y el entorno.
China ha mantenido una actitud de aproximación cautelosa al cultivo a gran escala de transgénicos. Actualmente sólo permite la producción de algodón y papaya transgénicos y prohibe la producción comercial de cualquier tipo de alimento básico modificado genéticamente.
No obstante, el país es un gran importador de productos agrícolas transgénicos, entre ellos soja, semilla de colza, algodón y maíz. China importó más de 71 millones de toneladas de soja el año pasado, la mayor parte de la cual era transgénica, de acuerdo con Han.
Fuente: Spanish.people.cn (http://spanish.peopledaily.com.cn/n/2015/0204/c31621-8845530.html)