Investigadores de Bangalore (India) desarrollaron tomates genéticamente modificados ricos en antocianinas, compuestos con conocida actividad antioxidante.
Los tomates transgénicos contienen dos genes de Antirrhinum (una planta con flores conocida como boca de dragón), y sólo en su estadio maduro se vuelven morados, tanto en la piel como en la pulpa. Este color se debe a las antocianinas, que tienen actividad antioxidante y están presentes en estos tomates transgénicos en niveles mucho más altos que en los tomates comunes (entre 70 a 100% más).
Las antocianinas son muy abundantes en frutas como la granada, los arándanos y las uvas, y tienen actividad antioxidante. Los antioxidantes son compuestos que previenen la muerte o el daño celular, y por lo tanto pueden proteger contra la enfermedad cardiovascular, el cáncer, la diabetes y la artritis.
Los científicos eligieron el tomate porque está ampliamente difundido y se consume en todas las formas: fresco, cocido y procesado. Además, es un cultivo muy productivo, disponible durante todo el año y los científicos saben cómo incorporarles genes por ingeniería genética.
Los tomates transgénicos también se podrían usar para la extracción de antocianinas, usadas ampliamente como nutracéuticos.
El trabajo fue publicado en la revista Current Science.
Hay que recordar que ni éstos ni ningún otro tipo de tomate transgénico se comercializa en la actualidad.
Fuente: ArgenBio (http://www.argenbio.org/index.php?action=notas¬e=6484)