La Comisión Técnica Nacional de Bioseguridad (CTNBio) aprobó la liberación para el cultivo comercial de poroto transgénico resistente al virus del mosaico dorado, el peor enemigo del cultivo en Brasil y América del Sur.
Desarrollado por la Empresa Brasileña de Investigación Agropecuaria (Embrapa), este poroto es el primer cultivo transgénico totalmente producido por instituciones de investigación pública. Fue el resultado de casi 10 años de investigación conjunta de Embrapa Recursos Genéticos y Biotecnología – Cenargen y Embrapa Arroz y Poroto.
“En las pruebas de campo realizadas, aún con una gran presencia de mosca blanca, insecto que transmite el virus del mosaico, las plantas transgénicas no se enfermaron”, afirma Francisco Aragão, investigador del Cenargen y uno de los responsables del proyecto.
El poroto transgénico presenta ventajas económicas y ambientales, como por ejemplo, la disminución de las pérdidas, la garantía de las cosechas y la reducción de la aplicación de defensivos. Con la aprobación, las semillas transgénicas serán multiplicadas y deben llegar al mercado en dos o tres años.
“Se realizaron todos los estudios de seguridad, y el poroto transgénico resultó tan o más seguro que las variedades convencionales, tanto para el consumo humano como para el medio ambiente”, resalta Aragão.
El poroto es un cultivo de extrema relevancia social, especialmente en América Latina y en África, siendo la leguminosa más importante en la alimentación de más de 500 millones de personas. En Brasil, es la principal fuente vegetal de proteínas y de hierro y, asociada con el arroz, da como resultado un alimento aún más nutritivo.
La producción mundial de poroto es de más de 12 millones de toneladas. Brasil ocupa el segundo lugar en ese ranking y es cultivado principalmente por pequeños agricultores, con cerca del 80% de la producción y del área cultivada en explotaciones de menos de 100 hectáreas. Una vez que el virus del mosaico dorado alcanza el cultivo, aún en la fase inicial, puede causar pérdidas de hasta el 100% de la producción. Según estimaciones de Embrapa Arroz y Poroto, lo que se pierde por la enfermedad sería suficiente como para alimentar a 10 millones de personas.