La Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) de Bolivia planteó al gobierno la ampliación del uso de la biotecnología con el uso de semillas genéticamente modificadas (GM) o transgénicas para la producción de algodón, maíz y caña de azúcar, con el fin de hacer estos productos más competitivos en el país.
Demetrio Pérez, presidente de la Anapo, le manifestó al periódico boliviano La Razón, que la propuesta fue presentada al gobierno junto con otras demandas del sector en un documento para que sea discutido en la cumbre agropecuaria “Sembrando Bolivia” a realizarse el 26 y 27 de este mes (marzo) en Santa Cruz.
Actualmente Bolivia siembra semillas genéticamente modificadas de soya, pero no de otros productos. “Uno de los puntos de nuestras demandas es ampliar el uso de la biotecnología en el maíz, algodón y caña”, puntualizó Pérez.
Estas declaraciones de la Anapo fueron hechas el pasado 14 de marzo en el cierre de la vigésima versión de Exposoya 2015, donde se presentaron 11 variedades de semillas de este grano, algunas genéticamente modificadas que son más resistentes a los efectos climáticos y a diferentes suelos.
“Necesitamos el acceso a los transgénicos para mejorar nuestra productividad y mitigar los efectos climáticos” declaró Pérez, y estimó que a causa de una extrema sequía en el municipio de Cuatro Cañadas y Pailón se perderán 120.000 hectáreas de la campaña de verano que va desde la siembra de la soya en diciembre de 2014 hasta la cosecha del grano en marzo de 2015.
Asimismo, Pérez recordó al gobierno que en Cuba se produce maíz transgénico, en China se producen transgénicos de algodón, papaya, tomate y pimiento dulce, que son alimentos de consumo diario. Por eso, considera que Bolivia no se puede quedar rezagada en el uso de la biotecnología respecto a las semillas.
“¿Por qué en Bolivia debemos quedarnos rezagados cuando otros productores igual que nosotros están ganando mucho más y siendo más eficientes en sus sembradíos? No es lo mismo producir 2,5 toneladas por hectárea en promedio, cuando en los países vecinos están con tres y hasta cuatro toneladas por hectárea”, enfatizó.
Vale la pena recordar que en el 2014 Bolivia sembró un millón de hectáreas con soya genéticamente modificada y ocupó el onceavo lugar en la lista (de 28 países) que siembran cultivos GM o transgénicos en el mundo.
Fuente: ArgenBio (http://www.argenbio.org/index.php?action=notas¬e=6924)